domingo, 7 de junio de 2009

EL ESPIRITU SANTO TE INMUNISA

Dios bendiga a sus templos vivos en el caminar de esta tierra, ruego al Dios vivo Jesucristo que haga de cada uno de sus hijos una antorcha encendida para todo aquel que esta en la oscuridad del pecado.
Somos pueblo del Dios viviente, apartados del mundo para vivir en santidad, edificandoce cada día con el Espíritu de verdad y libertad.
La libertad se gana agudizando el oído espiritual, para escuchar la voz del amado Espíritu Santo quien nos ISO libre con su palabra revelada en la verdad.
El Padre , el Hijo y el Espíritu Santo son una unidad poderosa y ellos tres reinan en el cielo y en la tierra y en todo lugar donde sea manifestada la trinidad divina.
El Padre es un todo, creador del universo y del hombre y de todo ser viviente de la tierra, el Padre en su infinita misericordia restauro lo que el maligno quiso destruir allí en el jardín del Edén.¿Como lo ISO : jehová, Dios Padre se ISO carne en su único hijo Jesucristo. El puso su Santo Espíritu en una joven virgen, María,a ella la lleno de su precencia engendrando en su vientre a Jesús su hijo, en espíritu , alma y carne para estar en medio de su pueblo.
María, la sierva del Dios vivo sufrió el desprecio de sus hermanos quienes dudaban de su santidad, también fue rechazada por su prometido José , a quien Dios le hablo diciéndole que lo que estaba en María era el Hijo del Dios vivo.
Aquí tenemos un misterio divino el cual seria manifestado mas tarde en los discípulos de Jesús, a quienes les dijo: es necesario que yo vaya a reunirme con mi Padre, pero enviare el consolador, el Espíritu Santo quien estará hasta el fin de los días con ustedes, también les dijo : no os salgáis de Jerusalén hasta que hayan sido investidos de poder, ¿ Cual poder ? El ESPÍRITU SANTO.
Cuando somos bautisados con el Espíritu Santo, nuestra vida ya no sera igual, porque el Espíritu Santo nos hace libres, el redarguye en nuestro ser cuando vamos por mal camino. La verdad se nos revela porque con el Espíritu Santo tenemos hambre y sed de justicia, nuestro caminar cada día se va renovando con el conocimiento divino del Espíritu Santo, rachásamos el pecado, pero amamos al pecador llevándolo a la verdad de la palabra revelada. El andar en la verdad y la justicia nos inmuniza, somos revestidos de la presencia divina del Dios vivo Jesucristo. al nacer de nuevo , esto es en el espíritu, nos hace sensibles al dolor de los demás y también sabemos distinguir lo santo de lo profano.
EL NACER DEL ESPÍRITU COMO HIJO DE DIOS SOMOS SENSIBLE A TODO LO ESPIRITUAL.

Con respeto a mi Dios : REMANENTE